Aguas residuales industriales - tan individuales como la propia producción industrial

Las aguas residuales industriales se entienden como las aguas resultantes de los procesos industriales. Dependiendo de su origen, está contaminada con una gran variedad de agentes contaminantes y debe ser tratada antes de poder verterse a la red pública.

¿Qué es el agua industrial? - Definición

Las aguas residuales industriales suelen utilizarse como sinónimo de aguas industriales, pero esto no es del todo correcto.

El agua industrial es el término genérico para el agua que se utiliza en la industria para los procesos de producción y fabricación. Esto incluye, por ejemplo, el agua para limpiar superficies, para preparar enjuagues, encurtidos o baños activos y otros.

Las aguas industriales, una vez que han cumplido su función en la producción, se convierten en aguas residuales industriales contaminadas.

La composición del agua industrial no está regulada: depende de los requisitos de la producción correspondiente y puede contener por ejemplo agua desionizada (agua totalmente desmineralizada/destilada) o también agua urbana del grifo.

La composición de las aguas residuales industriales tampoco puede generalizarse. Es tan individual como la producción de la propia industria.

Tipos de aguas residuales industriales

Los contaminantes presentes en las aguas industriales difieren enormemente en función de la industria de la que proceden las aguas residuales industriales.

Ejemplos de tipos de aguas residuales industriales serían:

1. Contaminación alcalina
   procedentes de la industria metalúrgica o química (por ejemplo, los agentes curtientes utilizados en las fábricas textiles).
   
   
2. Agua de refrigeración
   por ejemplo, para las centrales nucleares, suele asegurarse con agua tratada de los municipios circundantes. En este proceso, el agua de refrigeración se evapora por completo y la central nuclear no libera agua al medio ambiente. La contaminación radiactiva puede encontrarse en las aguas residuales de las instalaciones mineras de uranio y en las instalaciones médicas (rayos X).
   
   
3. Contaminantes orgánicos
   por ejemplo, de la industria cárnica, la producción de tensioactivos o las fábricas de papel (esta agua también suele tener un alto contenido de materia en suspensión).
   
   
4. Contaminación por aceite o grasa
   procedentes del procesamiento de metales (por ejemplo, mecanizado) o de operaciones de refinería, pero también de industrias que procesan productos animales, como mataderos o lecherías. 
   
   
5. Acidez o contaminación por metales pesados
   como en la industria galvánica, las plantas de blanqueo y decapado, así como en las industrias de tratamiento del carbón.
   
   
6. Contaminantes tóxicos
   como en la producción de explosivos, pesticidas y en la industria textil (teñido, curtido).
   
   
7. Contaminación por productos de limpieza
   por ejemplo, en lavanderías, en los hogares o en la industria de tensioactivos.
   

Gran cantidad de aguas residuales se producen en los talleres de pintura que limpian las piezas antes de recubrirlas.© AzmanL - iStock

Composición de las aguas residuales industriales

Las aguas residuales industriales suelen estar contaminadas con agentes contaminantes, que pueden clasificarse de la siguiente manera:

Impurezas en las aguas residuales industriales

son contaminantes que pueden estar disueltos en el agua, como sales u otros líquidos ligeros aceitosos que no se disuelven en el agua. Entre las sustancias que interfieren en las aguas residuales industriales también se incluyen la grasa, la arcilla o la arena.

Contaminantes en las aguas residuales industriales

son contaminantes del agua procedentes de la industria que pueden provocar enfermedades y otras reacciones intensas en el cuerpo humano. Los microplásticos, los residuos de medicamentos y detergentes y otras sustancias orgánicas sintéticas, así como virus, bacterias y hongos, también pertenecen a esta categoría, al igual que los venenos y los metales pesados.

Tipos de aguas residuales de la industria agrícola contaminadas por nutrientes

son, por ejemplo, los residuos de compuestos de fósforo y nitrógeno (fertilizantes) procedentes de la agricultura, que, cuando entran en las aguas estancadas, provocan la eutrofización. Esto significa que este exceso de nutrientes puede provocar un crecimiento excesivo/perjudicial de diversas especies vegetales (por ejemplo, la proliferación de algas).

Propulsores

son en su mayoría biodegradables y producen un olor agrio durante el proceso de degradación anaeróbica. El ácido úrico y la glucosa en el agua provocan el agotamiento del oxígeno y, por tanto, reducen su contenido en las masas de agua. Como consecuencia, la contaminación industrial del agua amenaza a la población de peces.

En general, sólo un pequeño porcentaje del agua contaminada está formado por impurezas en forma disuelta y no disuelta o como compuestos orgánicos, y la mayor parte está formada por agua. Por lo tanto, merece la pena reducir la contaminación mediante sistemas de tratamiento de aguas residuales en los que el agua filtrada y limpia pueda reutilizarse en la producción.

Contaminación del agua por la industria

La industria necesita grandes cantidades de agua para diversos procesos de fabricación. En el curso de la producción esta agua se contamina y, por tanto, debe ser tratada según las normas de la Ordenanza de Aguas Residuales antes de que pueda volver al ciclo de uso en el que las personas podrían entrar en contacto con ella.

Tratamiento de aguas industriales

El tratamiento de aguas industriales consiste en eliminar los contaminantes del agua para devolverle su calidad original. La Ordenanza de Aguas Residuales especifica ciertos requisitos mínimos para determinados sectores industriales alemanes. Una vez pretratadas (por ejemplo, en un separador), las aguas residuales industriales se tratan en depuradoras. Según el tipo de contaminación, se utilizan distintos métodos de depuración. Encontrará más información sobre los distintos métodos de tratamiento en Tratamiento de aguas residuales industriales.

Eliminación de aguas residuales industriales

La Ordenanza de Aguas Residuales también contiene requisitos para la eliminación de aguas residuales industriales.

Las aguas residuales contaminadas o enriquecidas con nutrientes no pueden verterse en las aguas públicas. Por ello, la Ordenanza de Aguas Residuales prescribe determinados valores límite que deben cumplir las aguas para no tener que ser tratadas o eliminadas.

Uno de estos valores límite es, por ejemplo, el valor DQO (demanda química de oxígeno), que representa cuánto oxígeno consumen los procesos químicos de digestión o depuración en las aguas residuales. Si este valor es alto -es decir, los procesos químicos de depuración de las aguas residuales consumen mucho oxígeno-, significa que las aguas residuales aún no se han tratado lo suficientemente bien. El límite máximo del valor de DQO en Alemania es de 150 mg por litro de agua.

Básicamente todos los métodos de tratamiento dejan residuos que deben eliminarse de forma profesional. La destilación al vacío es un proceso muy eficaz y reduce la cantidad de aguas residuales de forma tan drástica que la cantidad de residuos al final del proceso de destilación al vacío es sólo del 2-3% de la cantidad original de aguas residuales. En el proceso, el agua residual se concentra sólo hasta el punto en que el residuo es lo suficientemente líquido como para ser drenado de la máquina.

Seguidamente una empresa de gestión de residuos recoge estos concentrados con un camión cisterna, en el caso de grandes cantidades, o con el llamado contenedor intermedio para graneles – IBC o GRG (coloquialmente también conocido como "cisterna de rejilla") en el caso de pequeñas cantidades. Estos residuos se recolectan en una instalación de almacenamiento intermedio de residuos peligrosos autorizada y, a continuación, se envían para su eliminación adecuada. Según el tipo de contaminantes que contengan, puede tratarse de un tratamiento físico-químico, de un tratamiento mediante plantas de destilación posterior o de la incineración de residuos peligrosos.

Por desgracia, los tres procesos dejan residuos que contienen metales pesados, sales y aceites perjudiciales para el medio ambiente, por lo que deben almacenarse de forma segura en vertederos.

Las aguas residuales muy contaminadas con metales pesados (como los residuos de destilación de los procesos galvánicos) pueden introducirse en la recuperación de materias primas para extraer níquel, cromo, oro o plata de aguas residuales.

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